PSC EN FORMA !!!..
Los que creemos en la cultura del esfuerzo sabemos que nadie regala nada, que los exagerados pierden credibilidad y los calimeros son ninguneados. Los que confiamos en nuestras propias fuerzas sabemos también que los procesos en política son largos, que requieren su tiempo de maduración, su oportunidad. A las puertas de un otoño electoral podemos aventurarnos ya a hacer un breve balance de los últimos cuatro años. La obra de gobierno ha sido enorme, tanto en el terreno legislativo como en el ejecutivo. El acento expreso del presidente Montilla sobre las políticas sociales y anticrisis se ha hecho notar; de no haber sido así otro gallo cantaría en la coyuntura actual. Catalunya ha avanzado como nunca y más deprisa que nunca, pero, a pesar de ello, el virus de los malos humores ciudadanos ha cuajado. Paradojas del destino: la inacción y el compadreo porcentual de la época Pujol navegó sobre aguas tranquilas; la hiperactividad del tripartito se ha mecido en un mar proceloso repleto de tiburones.
Pues bien, en este final de legislatura, libres ya de mochilas compartidas y caprichos varios, es procedente que cada cual vuelva a ser quien es, a la esencia que le identifica. Pese a quien le pese, los socialistas catalanes no estamos ni resignados, ni abatidos. No lo estamos por que mostramos orgullosos los logros del gobierno –quizá hubieran sido diferentes y mejores si hubiéramos gobernado en solitario-y los defendemos. No vivimos tristes y resignados por que sigue vigente nuestro empeño de recuperar, en su totalidad, l’Estatut. Que nadie lo dude, para lograrlo contamos con el apoyo solidario de nuestros compañeros del PSOE. Sin ellos no estaríamos hablando de recuperar sino de crear.
No somos hipocondríacos. No estamos abatidos por que vamos a dar mil batallas para conseguir unos resultados electorales que nos permitan gobernar con holguras y sin hipotecas.
Nos sentimos con fuerzas suficientes, contentos y combativos por que en la jungla de los definidos, y de los interesadamente ambiguos, aparecemos diáfanos, nítidos. Vamos a explicar nuestro modelo de convivencia, para Catalunya y España, señalando lo nocivo que sería para nuestro país el oportunismo de unos y el aventurerismo de cuatro iluminados.
Los socialistas proponemos defender, desde nuestro catalanismo, una relación federal entre Catalunya y España. Estamos convencidos de que ambas no so realidades separables. Rechazamos que una nación se defina en función de una identidad nacional homogénea basada en razones étnicas, lingüísticas o culturales. Sostenemos que Catalunya es una nación plural y diversa, que España es una nación de naciones que pueden convivir en un mismo estado. Elemento este último que no conlleva renuncia alguna a conseguir mayores cotas de autogobierno.
Que quede claro: el PSC no es un partido nacionalista, nuestro objetivo no es la independencia de Catalunya ni el cantonalismo. Nuestra opción es un federalismo fraternal que conlleva compartir, con otros pueblos de España, un mismo estado.
No renunciamos tampoco a la lucha contra las desigualdades sociales, a la salida de la crisis, a democratizar la justicia e higienizar la democracia.
Las tareas pendientes son ingentes. Unas son de recuperación -que consideramos factibles, caso del Estatut- y otras, de futuro encaminadas a ofrecer bienestar social y seguridad a nuestra ciudadanía.
Ni resignados, ni abatidos. En forma, libres de hipotecas, con las ideas claras y dentro de los parámetros que caracterizan a la socialdemocracia moderna.
<< Home