¡ BRAVO SAN AGUSTIN !
HETERODOXOSARTURO San Agustín.
EL PERIODICO
Ha muerto un barcelonés heterodoxo, un verdadero y auténtico heterodoxo. Y cuando muere un verdadero, un auténtico heterodoxo, la vida, ese río, se resiente más, mucho más. Lo que pasa es que las noticias, como decía mi abuelo anarquista --"¿qué dicen las noticias?"--, nunca dicen o cuentan nada de los verdaderos heterodoxos.Ha muerto Luis Andrés Edo, producto experimental e intelectual --así lo definían en la solapa de su libro La CNT en la encrucijada-- del asambleísmo de la CNT, de la asamblea más importante del exilio, que ha sido, según los entendidos, la de París. Y si el abogado Mateo Seguí dice de Luis Andrés Edo que entendió la vida como compromiso y que así la vivió, significa que este heterodoxo y humanista libertario fue alguien importante y necesario.En estas cosas de la anarquía y lo libertario hay que andarse con mucho, con muchísimo ojo y por eso yo siempre consulto con mi amigo Mateo Seguí, quien, refiriéndose a Edo, autor también del libro La corriente, ha dicho que "la corriente del río es, fue la corriente de Edo, sin vuelta atrás, siempre hacia adelante, aunque, muchas veces, el adelante no exista". Sobre la corriente, sobre lo que él llamaba la corriente, el heterodoxo Edo decía: "El movimiento libertario no va a ser capaz de utilizar en su provecho toda la efervescencia actual si no recurre a un discurso más pragmático y, desde luego, no centrado en la estrategia sindical, que está agotada. Yo reivindico conceptos nuevos como las asambleas ambulantes, por llamarlas de alguna manera, de los antiglobalización".Algunos ángeles rojos o poetas anarquistas, como Melchor Rodríguez, han rimado la anarquía con la poesía y la armonía. Y con la belleza y el amor. Etcétera. Yo, insisto, en el océano que nos ocupa, nunca me embarco sin consultar antes con Mateo Seguí, tan heterodoxo como Edo y menorquín de grandes y permanentes tozudeces, que, al ser isleño, algo o mucho sabe de navegaciones. "Atención, aviso para navegantes: no hay rumbos rectos."La vida como una aventura. Y no de esas que nos sacan en las televisiones actuales.
Ha muerto un barcelonés heterodoxo, un verdadero y auténtico heterodoxo. Y cuando muere un verdadero, un auténtico heterodoxo, la vida, ese río, se resiente más, mucho más. Lo que pasa es que las noticias, como decía mi abuelo anarquista --"¿qué dicen las noticias?"--, nunca dicen o cuentan nada de los verdaderos heterodoxos.Ha muerto Luis Andrés Edo, producto experimental e intelectual --así lo definían en la solapa de su libro La CNT en la encrucijada-- del asambleísmo de la CNT, de la asamblea más importante del exilio, que ha sido, según los entendidos, la de París. Y si el abogado Mateo Seguí dice de Luis Andrés Edo que entendió la vida como compromiso y que así la vivió, significa que este heterodoxo y humanista libertario fue alguien importante y necesario.En estas cosas de la anarquía y lo libertario hay que andarse con mucho, con muchísimo ojo y por eso yo siempre consulto con mi amigo Mateo Seguí, quien, refiriéndose a Edo, autor también del libro La corriente, ha dicho que "la corriente del río es, fue la corriente de Edo, sin vuelta atrás, siempre hacia adelante, aunque, muchas veces, el adelante no exista". Sobre la corriente, sobre lo que él llamaba la corriente, el heterodoxo Edo decía: "El movimiento libertario no va a ser capaz de utilizar en su provecho toda la efervescencia actual si no recurre a un discurso más pragmático y, desde luego, no centrado en la estrategia sindical, que está agotada. Yo reivindico conceptos nuevos como las asambleas ambulantes, por llamarlas de alguna manera, de los antiglobalización".Algunos ángeles rojos o poetas anarquistas, como Melchor Rodríguez, han rimado la anarquía con la poesía y la armonía. Y con la belleza y el amor. Etcétera. Yo, insisto, en el océano que nos ocupa, nunca me embarco sin consultar antes con Mateo Seguí, tan heterodoxo como Edo y menorquín de grandes y permanentes tozudeces, que, al ser isleño, algo o mucho sabe de navegaciones. "Atención, aviso para navegantes: no hay rumbos rectos."La vida como una aventura. Y no de esas que nos sacan en las televisiones actuales.
posted by Joan Ferran @ 10:30 a. m.
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