CiU TIENE CUARTO OSCURO
Las amenazas de Felip Puig a Ignasi Guardans, con la intención de que no abra la boca ni profiera comentarios “inadecuados”, son más propias de un comisario político de la escuela estalinista que de un anfitrión de la tan anunciada “Casa Gran del Catalanisme”.
En los corrillos del Parlament se asegura que Puig vela armas a la espera de que Artur Mas, por activa o por pasiva, no alcance gobernar. Mientras tanto el comisario Puig ningunea a las gentes de Unió y a Duran Lleida intentando consolidar su posición en el seno de CDC..
Si, pero algo le puede al beligerante Felip. No soporta la gente con criterio propio, capaz de rebelarse ante lo improcedente, como hace Guardans. Es en esos momentos cuando el pronto le delata y amenaza al decapitado eurodiputado con un correctivo disciplinario.
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