LA PATRIA DE LOS RICOS

LA PATRIA DE LOS RICOS


Hace pocos días Enric Juliana, en su columna de análisis de La Vanguardia, destacaba el uso reiterado de la palabra ‘patria’ empleado por Pablo Iglesias desde la tribuna de oradores. El líder de Podemos echó mano de ella al menos seis o siete veces para referirse a lo colectivo, al bienestar, o la gente en contraposición a los poderosos, a los de arriba.

Desde hace siglos las palabras patria, y patriotismo, están llenas de significados diversos. Son conceptos que han variado en el transcurso de los tiempos y con el contenido que le han querido dar pensadores, políticos, escritores y juristas. La noción de patria en la cultura occidental bebe de los clásicos griegos y romanos. En las obras de Tucídides patriotismo se asocia a libertad, pero esta libertad no está necesariamente ligada a un territorio sino a los ciudadanos titulares de derechos. En la antigua Roma el concepto patria se relaciona indefectiblemente a la idea de bienestar. Séneca definió la patria como el lugar donde vivir bien. No va a ser hasta el siglo XIX que esta percepción de la patria, y lo patriótico, se vea sustituida por la impulsada desde las ideologías nacionalistas; pero eso sería largo de comentar.

 

Parece ser, pues, que el Pablo Iglesias que arengó a las multitudes en la madrileña Puerta del Sol ha optado por retornar a los clásicos o, por lo menos, a los principios de la revolución norteamericana sobre los que habló y escribió Alexis De Tocqueville; es decir, a unos planteamientos que han puesto en guardia a todas las ramas y ramitas del soberanismo nacionalista catalán. La cosa promete.

Ahora bien, puestos a recuperar escuelas del pensamiento, a un servidor le hubiera encantado oír desde la misma tribuna uno de los párrafos que en su día escribiera Gustave Hervé en ‘La patria de los ricos’, el que dice así:

 

“No es difícil dar con el motivo de por qué las clases directoras en todas partes cultivan el sentimiento patriótico en el corazón de las muchedumbres… Es indispensable para las clases directoras que los pueblos que oprimen abriguen la íntima convicción que los intereses de los ricos y de los pobres están estrechamente unidos en la nación”.

 

Amigo: Dime que es para ti la patria y te diré si estas arriba o abajo.