El blog d'en Joan Ferran

29.11.15

SOBRE EL TEMA DEL YIHADISMO Y EL POSTUREO







¿BOMBARDEAR? 


        No me gustan los partidarios de la ley del Talión.           Tampoco me convencen los  que abogan por poner la otra mejilla. El belicismo me disgusta pero el buenismo me inquieta por lo que tiene, a veces, de ingenuo y paralizante. Observo como el laborismo británico se encuentra al borde de la ruptura a causa del apoyo, o no, a las acciones de castigo contra el Estado Islámico. Contemplo también el posicionamiento automático, en uno y otro sentido, de la mayoría de los partidos políticos españoles con la sensación de que no gozan de un conocimiento profundo acerca del tema. Parece que tan solo andan preocupados por cómo va a reaccionar la opinión pública al respecto. 

No creo en las soluciones únicas ni mágicas; tampoco en los apriorismos al uso de nuestra elite política. La situación mundial, y el NO a la guerra al que nos llevaron los pirómanos de las Azores, tiene poco que ver con las circunstancias presentes, ergo, según qué tipo de movilizaciones, manifestaciones y discursos interesados me huelen más a táctica cortoplacista que a propuesta seria con garantía de buenos resultados. Se comenta que las contundentes acciones de la coalición internacional pueden generar una espiral de violencia de final incierto. No lo discuto, quizás sí, pero también sabemos por experiencia histórica que el terrorismo necesita de “santuarios” para operar o, en su defecto, de espacios donde las estructuras de estado no lleguen o no sean capaces de ejercer funciones de control y/o represión. En determinadas zonas de África la ausencia de control territorial de los estados facilita la actividad de grupos terroristas (Mali, Mauritania…). 

Atenuar los zarpazos del EI en Europa –no sólo los violentos, sino también los informáticos- ha forzado a determinados países a tomar medidas transitorias que comportan bombardeos, daños colaterales y limitación de libertades. La exigencia de seguridad reclamada por los ciudadanos tiene un precio a pagar tanto en Oriente Medio como en el ámbito europeo. Considero que el debate sobre qué hacer respecto al yihadismo no debería de contaminar en ningún sentido la campaña electoral española. Las circunstancias actuales poco tienen que ver con las de la época en la que se hablaba de Irak y de armas de destrucción masiva. Urge hacer un esfuerzo colectivo para comprender las nuevas coordenadas en las que nos movemos. Tanto es así que he decidido, antes de polemizar con amigos y compañeros, leer y recomendar el libro“Objetivo Califato Universal. Claves para comprender el yihadismo” de Jordi Bordas y Eduardo Martín de Pozuelo. Léanlo… y luego hablamos, discutimos o nos manifestamos con más conocimiento de causa.