El blog d'en Joan Ferran

6.12.15

LAS REGLAS DEL JUEGO







CINE ÚTIL PARA POLITICOS 



Permítanme que les recomiende el último film de Steven Spielberg protagonizado por Tom Hanks y en el que han participado los hermanos Coen. La película, ambientada en los años de la Guerra Fría, narra con gran maestría las vicisitudes de un abogado norteamericano intentado pactar un intercambio de prisioneros entre los dos bloques antagónicos. No les voy a contar a ustedes la trama. No. Aprovechen el día del espectador y vayan al cine, vale la pena. La razón de estas líneas no es esbozar una crítica cinematográfica si no subrayar la firmeza moral, las profundas convicciones democráticas y el sentido de estado del que hace gala el protagonista. 

 Vivimos tiempos de cambios, de movimientos emergentes y nuevos paradigmas. Se habla de los de arriba y los de abajo, de los nuevo y lo viejo sin interiorizar que los viejo alguna vez fue nuevo y lo nuevo empezó ya a envejecer. Vivimos tiempos de trashumancia política, de conversiones exprés, de transfuguismo y de postureo. Es tan grande el guirigay que conservadores de toda la vida mutan a anticapitalistas atreviéndose a pedir al ciudadano que desobedezca las leyes, mientras revolucionarios irredentos intentan salvar el pellejo a recortadores compulsivos…. 

Pues bien, y volviendo al Puente de los Espías. Un agente de la CIA pretende que el abogado en cuestión se muestre negligente y despreocupado en la defensa del espía soviético. El letrado tiene criterio, no cede y defiende su profesionalidad. Le recuerda al funcionario de inteligencia cuales son los valores, los principios y los derechos de las personas que consagra, incluso para los enemigos del país, la Constitución Americana. El diálogo entre ambos reza, más o menos, así:
 “Yo soy de origen irlandés y usted de origen alemán pero somos americanos porque ambos respetamos las reglas” (la constitución). 
 ¡Qué gran frase! La considero idónea para más de uno de esos personajes que medran en la política catalana y española. Vayan al cine, por favor.