CUESTIÓN Y GESTIÓN DE TIEMPOS EN EL SOCIALISMO ESPAÑOL

SOBRE EL PSOE Y LOS CATALIZADORES

La voz robusta de Elena Valenciano ha intentado cortocircuitar la quiniela sobre los futuros liderazgos del PSOE. La Vicesecretaria General del partido se ha esforzado, ante el micro y la cámara, en despejar curiosidades malsanas tras la obertura del melón sucesorio. Ahora bien, sinceramente, dudo que haya conseguido salir airosa y satisfecha del aperitivo informativo generado alrededor del tema. De las primarias y de los posibles cambios en la cúpula del socialismo español se va a hablar una y mil veces de hoy en adelante, lo quieran o no los interesados y su oficina de prensa. Las respuestas políticamente correctas ofrecidas por Patxi López, Eduardo Madina o García-Page son eso: balones despejados fuera del área que no tardaran en retornar al punto de penalti.

Con todo me parece lógica y acertada la decisión de la dirección socialista de no favorecer un debate prematuro, a destiempo, sobre las primarias. Nos hayamos casi en los albores de la legislatura y el equipo Rubalcaba tiene ante sí la tarea de vertebrar una oposición útil y reanimar el partido. Pero una cosa es la lógica del Secretario General y otra muy distinta la de los catalizadores, los aceleradores de procesos. Y un servidor, a bote pronto, ya detecta tres de esos elementos. A saber:

Primero. El catalizador que emana de la lógica periodística. Tanto de la lógica honesta y profesional como de la interesada que labora al dictado del mejor postor (o de la caverna). Cuando una oposición no está fuertemente constituida, y deja espacios para la especulación, estos espacios son ocupados por medios de comunicación que usan el impacto efectista, la frase corta- cuando no reduccionista- con ánimo de marcar agenda a placer. El objetivo de los buenos profesionales es informar; el de otros, fabricar mercancía informativa. Pero todo ello está ahí y es de uso corriente en nuestra sociedad.

Segundo. Cuando los sondeos y encuestas no son lo suficientemente favorables para una formación política una extraña inquietud se apodera de sus sanedrines partidarios. El dictado de las encuestas ha llegado a ser tan influyente que subvierte programas, elimina candidatos, modula mensajes y remoza ideologías al gusto de la opinión consultada por los expertos. Actualmente los oráculos no son excesivamente bondadosos con Rubalcaba y su equipo; ergo, algunos en el PSOE quizás juegan ya a catalizar.

Tercero. Las legítimas ambiciones y aspiraciones personales generan todo tipo de estrategias, sinergias, pactos y movimientos subterráneos. Agrupar a los afines o granjearse amistades mediáticas conlleva la necesidad de afirmarse y mostrar superioridad respecto al contrincante. La competencia comienza, casi siempre, antes que la confrontación. El inicio oficial de un proceso tipo primarias no se corresponde con la realidad, el combate se inicia cuando alguien intuye que otro alguien puede optar a batirse por llegar el primero. Los aspirantes catalizan pues desde el secreto o desde la discreción… Pero lo hacen.

Visto lo visto cobra vida un viejo refrán: 'No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy'...No vaya a ser que se escape el tiempo.