El blog d'en Joan Ferran

30.5.14

SOCIALISTAS FOREVER





NO SE APELOTONEN

 
Por favor, amigos: No se apelotonen; procedan con calma; las cosas bien hechas requieren su tiempo. Es cierto, los resultados electorales interpelan a la familia socialista. Es evidente que muchos ciudadanos con su abandono o abstención han mandado señales de alerta a las direcciones socialistas. Otros, legítimamente, han optado por cambiar de buque insignia camino de otros puertos. Aceptémoslo, las cosas han ido así y vienen dadas por circunstancias que ahora no pienso desgranar. Pero estamos ahí, en una encrucijada, discutiendo sobre si son galgos o podencos. Transmitiendo a nuestros sufridos seguidores, votantes y simpatizantes un mensaje excesivamente ‘internista’, orgánico.
 ¿Qué fue antes el huevo o la gallina? ¿Qué es más urgente un congreso o unas primarias? ¿Todo el poder a los delegados o a los soviets?... Versión ciento cincuenta mil, todo ello, de las viejas polémicas. Alguien dijo que las primarias llegaron aquí para quedarse. ¡Háganse! Hágase también el congreso y utilícese para meditar acerca del nuevo tiempo político que se abre ante nosotros. Nos hallamos ante una situación inédita que va más allá de los resultados de unas elecciones europeas. Reestructuremos la casa, abramos puertas y ventanas. De acuerdo, pero más allá de los procedimientos y los cambios de protagonistas es imprescindible esbozar un proyecto político tan creíble como factible. El brindis al sol anunciando un giro a la izquierda ya no es suficiente, suena a gastado. Insisto, corremos el riesgo de encallarnos en los procedimientos y no abordar algo tan esencial como el nuevo rol de los socialistas tanto en España como en Cataluña.
Recuerdo las palabras de Martin Schulz en el mitin de los socialistas celebrado en Barcelona con Valls, Valenciano y Felipe González. Afirmo, el alemán, que a lo largo de la historia la socialdemocracia, como corriente de pensamiento político, ha demostrado una gran capacidad de adaptación a los cambios y los tiempos. Sus sucesivas reconversiones han estado presididas siempre por unos referentes asentados en la justicia social, la libertad y los derechos de las personas. Comparto esta apreciación en lo que tiene de optimista de cara al futuro.   Pues bien, manos a la obra. Para este viaje va a ser necesario, en primer lugar, asumir la magnitud de la derrota. Tras ello, y sin melodramas al uso, habrá que proceder a un relevo de personas – cuando sea el momento oportuno y sin presiones exógenas- que no puede ser un ‘ritornello’ ni una recuperación de políticos ‘vintage’. Más tareas pendientes. Con la que ha caído en este país es imprescindible convertirse en un referente resistencial. Eso solo se logra con una propuesta programática e ideológica solvente y factible, tanto a medio como a corto plazo…
Por favor, amigos y compañeros de viaje: No nos apelotonemos. ¿Primarias?: Sí. ¿Congreso?: También, pero al mismo tiempo lo dicho. Urge esbozar un proyecto comprensible que dé respuesta a las exigencias de la nueva sociedad que emerge.  O eso o le ‘déluge’.