El blog d'en Joan Ferran

9.7.19

FONDO...PERO FONDO





PILAR & ELSA ...TOCANDO FONDO



 La inefable Pilar Rahola posee tele amiga y columna periodística permanente bien remunerada. Desde ellas suele ejercer de agorera. A veces acierta. Acertó en su día, desde las páginas de La Vanguardia, cuando aconsejó al ex presidente Jordi Pujol que explicara los orígenes del peculio que atesoraban tanto él, como su esposa y prole. Luego llegó el escándalo y la vergüenza se apoderó del cosmos nacionalista. Pilar le ha dado de nuevo a su pluma pitonisa para narrar que estamos asistiendo a la caída de un simulacro: el simulacro de la unidad del independentismo. Las negociaciones y pactos para gobernar la Diputación de Barcelona le han servido de excusa para lamentar que nadie en el mundo secesionista tiene claras las estrategias, que los intereses de partido se han apoderado del personal y que la cuestión nacional ha sido ladeada. La omnipresente Pilar de TV3 -sin parafrasear a Artadi pero de acuerdo con ella- también afirma que el independentismo ha tocado fondo, que unos y otros pretenden llegar los primeros a la tierra prometida. Anhelan esa cosa tan manoseada que Antonio Gramsci denominó hegemonía. Pero tanto Elsa, como Rahola, obvian lo más grave y triste de la situación. A saber: los ejecutivos procesistas que han gobernado Cataluña a lo largo de estos años han lesionado gravemente la unidad social del pueblo catalán, han perjudicado su economía y bienestar. Tanto los de Puigdemont, como los de Junqueras, no sólo no han conseguido su quimera independentista sino que también han maleado su propio movimiento. No hay unidad si no simulacro dice una; hemos tocado fondo argumenta la otra. Gabriel Celaya en sus ‘Cantos iberos’ escribió: “…nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno. Estamos tocando el fondo.” Hasta ahora todo ha sido un adorno, un patético adorno exento de belleza y preñado de conflictos.