CARTA AL ‘PRESIDENT’ TORRA
Sr.
‘President’:
Le escribo esta carta porque algo me dice que no
puedo, que los ciudadanos no podemos, confiar en usted. Me explicaré con más
detalle.
No puedo confiar en usted porque en sus palabras y
discursos, y sospecho que en su fuero interno también, siempre hay un
‘nosotros’ y un ‘ellos’ incompatibles.
No puedo confiar en usted porque nunca se sabe, a
ciencia cierta, si sus ideas y declaraciones públicas son propias o están dictadas
por otro individuo desde la lejanía. No puedo confiar en usted porque su
comportamiento protocolario, e institucional, no está a la altura de lo exigible
a un presidente de la Generalitat.
No puedo confiar en usted porque su respeto, apoyo y
consideración a la labor de las fuerzas de seguridad dejan mucho que desear;
porque su perversa permisividad provoca daños en las infraestructuras,
dificulta la movilidad y tolera el vandalismo callejero.
No puedo confiar en usted porque su forma de hacer
política es hija de un pasado poco honorable que bebe de porcentajes
inconfesables bajo investigación judicial, porque sus acólitos siguen
confeccionando listas negras y otorgando patentes de patriotismo, porque su
portavoz gubernamental niega sistemáticamente la evidencia.
No puedo confiar en usted porque prioriza lo simbólico
sobre lo vital, lo identitario sobre lo necesario, lo propagandístico sobre lo
educativo y el bienestar social; porque su gestión política es ineficaz y
paralizante.
No puedo
confiar en usted porque en este país las
empresas se sienten inseguras, los
inversores huyen a otros lugares en busca de estabilidad, porque se debilita nuestro tejido productivo
poniendo en situación de peligro miles de puestos de trabajo.
No puedo confiar en usted porque antepone su ciego
activismo a la prudencia y ponderación que se supone propia de un político cuerdo,
porque cada vez que leo artículos que un día escribió me estremezco.
No puedo confiar en usted porque no sabe apreciar la diferencia
entre lo importante y lo accesorio, porque alienta una política mediática
acrítica y manipuladora.
No puedo
confiar en usted porque apela rutinariamente a las emociones en detrimento de
las razones.
No puedo confiar en usted porque no es capaz de
condenar la violencia en todas sus
facetas, porque obvia que el dialogo necesario nunca puede ser fruto de
un chantaje, porque le creo partidario del ‘cuanto peor mejor’.
Y finalmente, señor ‘President’, no puedo -y sospecho que los ciudadanos sensatos
tampoco- confiar en usted porque piensa en amarillo y sueña en blanco y negro.
Atentamente.
<< Home