El blog d'en Joan Ferran

22.4.24

Roses - Son de Rosas SANT JORDI

19.4.24

RECUPERAR LO SINGULAR...

 

EL TRAMVIA BLAU 


 Hace casi ciento cincuenta años que el tranvía, como medio de transporte urbano, está omnipresente en la historia de la ciudad de Barcelona. Lo estuvo en las luchas obreras de 1919 -las de La Canadenca- que arrancaron del conde de Romanones el decreto que estableció la jornada laboral de las ocho horas; lo estuvo también en plena dictadura franquista con la mítica huelga de tranvías de 1951 y la de 1957. Tras vicisitudes varias y ingentes debates, el tranvía ha regresado a las calles de la metrópoli y el alcalde Jaume Collboni acaba de anunciar la unión del trazado por la Avenida Diagonal. Nada que objetar al respecto, pero quizás sí plantear que una urbe moderna, como Barcelona, debe combinar con sabiduría pasado y presente, tradición y modernidad. Recuperar lo genuino y emblemático es importante, nos hace como ciudad singulares, diferentes y atractivos. La iniciativa vecinal de rescatar el centenario Tramvia Blau camino del Tibidabo pone en valor el rico patrimonio modernista, arquitectónico y paisajístico de la capital catalana. Si Lisboa presume de un tranvía amarillo que serpentea cuesta arriba hasta el barrio de la Alfama, por qué no recuperar en Barcelona el trayecto del ‘Blau’. Permítanme un inocente juego de palabras. Si Tennessennee Willians y Elia Kazan nos hicieron vibrar con la película ‘Un Tranvía llamado Deseo’ por qué el consistorio no agiliza los trámites para satisfacer ‘el deseo’ de muchos barceloneses empeñados en recuperar este icono de la ciudad condal. Publicado en 20minutos

15.4.24

GRAN LUCHA Y ...¡PREMIO!

 


MUJERES 10 

 A Suiza, esa remilgada Doña Perfecta que suele mirar al mundo por encima del hombro, le han sacado los colores en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Es la primera vez que el Tribunal de Estrasburgo condena a un estado por su inacción ante los efectos nocivos del cambio climático. Perfecto, pero más allá de la importancia de esta sentencia y de su posible efecto multiplicador, conviene poner en valor el origen de la misma. Ha sido una asociación de mujeres mayores, la Verein KlimaSeriorinnen, la que con su lucha ha marcado el camino. La iniciativa de Las Abuelas por el Clima demuestra que ni la edad, el género o la condición social son un impedimento para los combates por los derechos de las personas. Salvando las distancias, la perseverancia de las mujeres helvéticas recuerda la lucha que protagonizaron, y aun protagonizan en Argentina, las Madres y Abuelas de la Plaza de Mayo. Como ejemplar es también la revolución silenciosa de las mujeres afganas e iraníes y la resilencia de las palestinas de Gaza. Todas ellas son mujeres 10 que moran en un mundo preñado de problemas y conflictos. Estas mujeres no guardan similitud alguna con las Bo Derek de los años 80, ni tampoco con los estereotipos creados por la industria cinematográfica. Nuestras mujeres activistas, al igual que las septuagenarias suizas, insinúan caminos y respuestas. Paul Valery sostenía que el grado de civilización de una sociedad se reconoce en el número de contradicciones que acumula. Contradicciones no nos faltan.

LA MISMA PIEDRA

 

SÍSIFO Y LOS POLIS 


 Para el recuerdo quedan las mini vacaciones de Semana Santa. Regresamos a nuestros quehaceres cotidianos sabiendo que los problemas siguen ahí, que las cosas no se solucionan por arte de birlibirloque. Arrastramos una piedra pesada por la empinada ladera de la justicia, como Sísifo en la mitología griega, pero antes de llegar a la cima la roca vuelve a caer, y así una y otra vez. ¿Les recuerda eso el problema de la reincidencia? Nuestros juzgados están saturados. Este último año se han incrementado los delitos en la ciudad de Barcelona más de un 8% mientras las detenciones lo hicieron un 23%. Las policías cumplen con su labor. Los juicios rápidos por delitos leves, como los hurtos que no pasan de 400 euros, se están ejecutando a nueve meses en Cataluña cuando la ley establece un plazo de siete días. Este tipo de retrasos impide que los jueces apliquen la agravante de multirreincidencia, para ello se requieren sentencias firmes que se demoran casi dos años en llegar. La sensación de inseguridad que inquieta a los ciudadanos está motivada, sobre todo, por los hurtos de poca monta, que suponen el 48% de los delitos cometidos. Mercadillos ambulantes, centros comerciales, aeropuertos, metro y autobús son el escenario preferido de los reincidentes. Urge reaccionar de nuevo vía Código Penal. Nuestras policías trabajan bajo una variante del síndrome de Sísifo -un quiero pero no puedo profesional- provocado por un exceso de trabajo y la escasa efectividad protectora del mismo.